LOS ÚLTIMOS AÑOS DE MI PRIMERA GUERRA
(Los últimos años de mi primera guerra, 2012)
Javier Yuste González
Editorial De Librum Tremens Editores
© Javier Yuste González, 2012
© De Librum Tremens Editores, 2012
1ª Edición, 2012
Género y tags: Novela histórica, Segunda Guerra Mundial, operaciones militares en el Pacífico de EEUU contra Japón en los años 1944 y 1945. Literatura española.
ISBN: 9788415074304
589 Páginas (628 incluyendo apéndices)
Argumento:
El suboficial mayor James E. Larrabeitia, estadounidense descendiente de españoles caídos en la Guerra de Cuba y veterano de varias guerras, decide reproducir sus diarios del periodo 1944-1945, escritos cuando contaba 23 años de edad y estaba al servicio de la Marina, luchando contra los japoneses a bordo del destructor Narhval DD-524.
Esas notas, tomadas al “pie del cañón” trasladan a ese “Infierno Azul” en que se convirtió el océano Pacífico en el momento en que la guerra fue especialmente brutal. Asistimos a crudos combates, escenas escalofriantes y dolorosas, terribles desembarcos como el de Leyte, el horror que se vivió en Manila o las acciones de los kamikazes.
Pero la novela nos muestra también la cierta tranquilidad que proporcionaban maniobras de entreno u operaciones en la retaguardia, los permisos de los marines en determinados puertos y cómo se aprovechaban, la ilusión con la que se esperaba el correo, los instantes de euforia, duda, reflexión…, novias y familias, amores rotos, chanzas entre compañeros y también peleas y envidias. Básicamente, se desgrana el interior de un ser humano en circunstancias tan especiales y terribles, con sus conflictos internos, cambios de carácter y constantes dudas; a caballo entre la lealtad, el honor, un odio irracional, el amor y temor o las ganas de vivir.
El libro se complementa con algunas ilustraciones y varios apéndices (descripciones e imágenes de diferentes armas de combate, modelos de aviones y barcos; listado de unidades que intervinieron en el desembarco de Leyte; lista de buques destruidos en las batallas de octubre de 1944; organigramas e insignias).
Opinión:
Explica el autor en una nota inicial que los personajes de la novela son ficticios, como lo es el buque USS Narhval DD-524. Esa nave y sus tripulantes, sin embargo, están encuadrados en un auténtico escuadrón de destructores, como el 48, que actuó en el Pacífico, de modo que los hechos y operaciones militares que se describen sí son reales.
Lo primero que me ha llamado la atención en esta novela es la gran cantidad de datos que Javier Yuste aporta referentes a las distintas armas, modelos de aviones y barcos que en uno y otro bando se utilizaron en ese “Infierno Azul” en que se convirtió el océano Pacífico casi al final de la guerra. Y esa información, que se completa con los apéndices, también es extensiva a la jerga militar, siglas, organigramas… Todo ello permite a los lectores situarse a bordo del Narhval de manera muy lograda.
Pero la novela, además, está escrita a modo de diario, rescatando apuntes tomados in situ, y eso la hace muy intimista e interesante. Es fácil pasar del miedo a la euforia, sentir las dudas del protagonista, entender sus conflictos internos, reír en determinados momentos y compartir sus secretos, incoherencias o ilusiones. No faltan, tampoco, escenas curiosas, como las que nos proporcionan una familia de gatos, convertidos en mascotas, y que contaban con un casco propio, número de identificación y una “categoría” dentro del organigrama de a bordo.
El libro desgrana muy bien ese abanico de sensaciones, intensas y contradictorias, que se dan en un ser humano, en éste caso llevadas al límite que exigen las circunstancias; y lo hace con un estilo atractivo, fácil de leer y entender aunque no se sea un experto en los entresijos militares de esa época concreta o la jerga propia de un marine.
Me ha parecido una obra muy instructiva, profunda e interesante. Hay que leerla con calma, eso sí. No es el típico libro para pasar el rato y devorar en unas horas. Aquellos lectores interesados en el Historia y muy especialmente en esa época concreta y lugar concreto disfrutarán, sin dudarlo, con muchísima información real como base de una interesante ficción.
Como nota adicional, sí me gustaría comentar que la mayoría de mapas, y muy especialmente las ilustraciones que se incluyen en los apéndices, resultan casi ilegibles. Ese es mi único “pero”.
@Pilar López Bernués |
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